¿Eres de esas personas que tienes problemas para dormir? Échale un vistazo a estos consejos que de seguro harán que el tan incómodo insomnio se aleje de tu vida para siempre.
Cuando se trata de atacar el temible insomnio, es necesario conocer que se trata de un trastorno recurrente del sueño, el cual incide de tal manera que impide que concilies el sueño o que simplemente te despiertes de forma repentina y que no puedas volver a dormirte fácilmente. Este problema, si se convierte en recurrente, debe tratar de solucionarlo con la finalidad de que no te afecte la salud, ni te genere otras consecuencias.
Estudios realizados han hecho referencia al hecho de que es un trastorno que suele afectar cada vez más a las personas, son múltiples sus causas, pero una de la que más influye es el ritmo de trabajo y el estrés a lo que estamos cada día más sometidos.
Para solucionar este tipo de problema suelen existir diversas opciones, es por ello que debes seguir algunos consejos, échale una revisada.
Insomnio y sus causas
Las personas que sufren de este problema suelen serlo debido a varios factores tales como:
–Causas médicas. Existen diversos factores que pueden incidir en la no materialización del sueño, tales como enfermedades hormonales, metabólicas, neurológicas, digestivas, cardiovasculares e incluso los trastornos psiquiátricos. Cualquiera de estas causas puede alterar el hábito del sueño en las personas.
–Causas externas. Estos son ciertos factores ambientales que de forma negativa influye en no poder dormir. Ejemplo de estos pueden ser, la adherencia a los malos hábitos, horarios de trabajo extenuantes, problemas personales e incluso abuso de algunas sustancias.
-Hábitos pocos saludables. Algunos ejemplos de estos hábitos nada saludables para las personas, especialmente para aquellas que tienen problemas al conciliar el sueño, son la excesiva actividad física, inexistencia de rutinas para irse a la cama e incluso el trasnoche realizado de manera regular. Cada uno de estos aspectos puede influir de forma determinante en cada una de las personas.
Síntomas
El síntoma más evidente del insomnio suele ser aquel en la que la persona presenta dificultad para poder conciliar el sueño, otros suelen ser:
-Despertarse de manera repentina por la mañana, con incluso sensación de cansancio y además presentar síntomas de irritabilidad.
-Poca concentración en el día.
-Dificultad para conciliar el sueño.
-Despertarse con frecuencia mientras dormir.
-Depresión.
-Dolor crónico y estrés.
Lo mejor que debes hacer si tienes problemas para dormir
Para nadie es un secreto que todos los seres humanos debemos dormir lo suficiente, al menos 6 horas todas las noches, todo con la finalidad de mantenernos activos y poder realizar nuestras actividades normales y para que todos nuestros órganos funcionen de manera correcta.
Si este no es tu caso y presentas problemas de insomnio, ya sea por la ingesta de algún medicamento o por presentar lo que se denomina como trastorno del sueño, es importante saber que este es un problema que puede fácilmente solucionarse, solo que debes cambiar ciertos hábitos.
· Cambios en tu día a día
Realizar estos cambios implica internalizar que debes necesariamente implementar cambios en tus rutinas diurnas, para ello debes realizar lo siguiente:
- Evitar el sedentarismo. Esto es una de las mejores acciones que puedes tomar, puesto que, llevando una vida más activa, ya sea mediante la realización de alguna actividad deportiva. Esto incidirá favorablemente en la calidad de tu sueño.
- No realices siestas largas. Es bueno realizar las llamadas siestas a mitad del día, básicamente porque estas nos permiten refrescarnos de alguna manera, pero se recomienda que estas se realicen durante determinado lapso, es decir, las mismas no deben superar los 30 minutos de descanso, esto es para que de noche se nos haga fácil dormir lo suficiente.
- Cuida lo que consumes. Para poder obtener el mejor de los descansos, es fundamental consumir de forma ligera la cena, así como hacerlo temprano. Esto con la finalidad de que puedas dormir sin alguna interrupción. Del mismo modo, recomiendan no consumir bebidas que puedan incitar el comportamiento.
- Practica la relajación. Con la finalidad de poder obtener el sueño deseado, se recomienda realizar antes de irte a dormir, actividades de relajación, baños de agua tibia e incluso escuchar melodías que inciten a la tranquilidad. Estudios realizados han dado a conocer aquellas actividades de relajación que más convienen para aquellos que sufren de insomnio, una de ellas es la respiración profunda e imaginar estar en un lugar relajante y tranquilo.
- Inculca en tu vida hábitos y rutinas. Si requieres mejorar tu problema, lo más recomendable es crear hábitos, tanto para acostarse y despertarse. Es por ello que se debe fijar horarios para dormir y levantarse.
- Haz de tu entorno un lugar tranquilo y apacible. Nuestro entorno es fundamental también para lograr sentirse bien, especialmente cuando se tiene trastorno de sueño. Por eso debes convivir en un ambiente relajado, para ello deberás tener un adecuado colchón ergonómico, almohadas especiales, tal como la New Pillow 360, evitar luces brillosas, evitar los sonidos, evite la presencia de los aparatos electrónicos.
Como conciliar el sueño
En el caso de que lleves un tiempo suficiente en la cama, es decir, unos 20 minutos aproximadamente, sin conseguir poder dormir, deberás realizar alguna actividad que haga de algún modo que puedas conseguir el sueño.
Una de las cosas que no debes hacer es quedarte acostado despierto. Si es tu caso, lo más aconsejable es irte a cualquier otro espacio en el que puedas lograr sentirte somnoliento. Si lo prefieres puedes realizar una actividad ligera, tal como leer un libro, escuchar música relajante, masajes corporales u otros.
Evita absolutamente el usar cualquier aparato electrónico, teléfono inteligente, radio, TV, tablet o cualquier otro aparato electrónico.
No veas el reloj, al hacerlo puede aumentar el estrés y desde luego no podrás conciliar el sueño.
Ayúdate con lo que se denomina ruido blanco, este tiene la finalidad de conseguir la relajación y seguidamente el sueño.