Los ritmos circadianos se definen como ciclos de 24 horas que forman parte del reloj interno del cuerpo y se ejecutan en segundo plano para llevar a cabo funciones y procesos esenciales. El ciclo sueño-vigilia es uno de los ritmos circadianos más importantes y conocidos.
En nuestro cuerpo hay diferentes sistemas que siguen ritmos circadianos, los cuales se encuentran sincronizados con un reloj maestro que funciona en el cerebro. Los ritmos circadianos están vinculados al ciclo del día y la noche e influencian de forma directa a nuestro reloj maestro a través de las señales ambientales, especialmente la luz.
En las personas los ritmos circadianos provocan cambios físicos y mentales, en los que se encuentra incluido el ciclo de sueño-vigilia, afectando la forma como descansamos. Estos tienen un propósito importante: preparan a nuestro cuerpo para los cambios esperados en el entorno, como el tiempo de actividad, el tiempo de dormir y el tiempo de comer.
¿Qué es un reloj biológico?
Un reloj biológico es un dispositivo de tiempo natural en los organismos, que tienen como función regular el ciclo de los ritmos circadianos. Se componen de proteínas, las cuales interactúan con las células de todo el cuerpo. En casi todos los tejidos y órganos del cuerpo humano, se encuentran presentes relojes biológicos.
Los investigadores han identificado genes similares en personas, moscas de la fruta, ratones, plantas, hongos y varios otros organismos que fabrican los componentes moleculares de los relojes biológicos.
¿A qué se le llama reloj maestro?
En el cerebro se aloja un reloj maestro que coordina todos los relojes biológicos en un ser vivo y es el que mantiene los relojes sincronizados. Tanto en los seres humanos, como en todos los animales vertebrados, el reloj maestro está compuesto de unas 20000 neuronas o células nerviosas.
Estas conforman una estructura llamada núcleo supraquiasmático o SCN, la cual es la parte del cerebro a la que llamamos hipotálamo y recibe información directa a través de los ojos.
Los ritmos circadianos y la salud
Se han realizado muchos estudios que demuestran cómo la alteración de los ritmos circadianos puede predisponer a nuestro organismo a sufrir de ciertas enfermedades. Enfermedades como la diabetes, trastornos del sueño, depresión, obesidad y hasta el cáncer, pueden ser originados por la alteración de los ritmos circadianos.
Todos en el transcurso de nuestras vidas seguimos un ritmo natural y cuando este es alterado por diferentes situaciones que pueden afectar el ritmo circadiano, este va a reaccionar en consecuencia. Cubrir turnos nocturnos, comer fuera del horario de comida o a altas horas de la noche, la exposición a la luz durante la noche, son situaciones que pueden afectarlo.
Sin embargo, las personas por lo general notan el efecto de los ritmos circadianos en sus patrones de sueño. El hipotálamo controla la producción de melatonina, una hormona que provoca sueño. Cuando, por ejemplo, hay menos luz por la noche, el hipotálamo le dice al cerebro que debe producir más melatonina para que te dé sueño.
¿Qué factores pueden cambiar los ritmos circadianos?
Por lo general cuando las personas hablan del ritmo circadiano, es más frecuente que lo hagan en el contexto del sueño. El ciclo sueño-vigilia es uno de los ejemplos más claros y críticos de la importancia de los ritmos circadianos y en la afectación del descanso.
La exposición a la luz hace que, durante el día, el reloj maestro envíe señales que generan alerta y nos ayudan a mantenernos activos y despiertos. Cuando llega la noche y baja la luz, el reloj maestro da inicio a la producción de melatonina.
Esta hormona, como ya hemos dicho, promueve el sueño, y transmite señales que nos hace permanecer dormidos durante la noche. El ritmo circadiano alinea los estados de sueño y vigilia con el día y la noche. Con esto busca favorecer un ciclo estable de descanso reparador que permita una mayor durante las horas del día.
¿Cómo afecta el ritmo circadiano el sueño?
Si tienes problemas para conciliar el sueño o despertarte a una hora normal, es posible que tengas alterado tu ritmo circadiano. Las alteraciones que se producen en el ritmo circadiano pueden darse a corto o largo plazo. Los expertos han identificado varios tipos de trastornos del ritmo circadiano del sueño y la vigilia en función de sus causas y características.
- Trastorno de jet lag: Tiene lugar cuando una persona cruza varias zonas horarias en un corto período de tiempo. Toma su nombre del hecho de que las personas que por lo general lo experimentan, suelen ser viajeros que toman vuelos intercontinentales.
El ritmo circadiano de una persona debe adecuarse al ciclo día-noche del país donde se encuentre. Durante este periodo, la persona debido al por el desfase horario puede tener problemas para dormir y fatiga.
- Trastorno avanzado de la fase del sueño: las personas que padecen este trastorno se cansan temprano en la noche y se despiertan muy temprano en la mañana. Si la persona desea acostarse más tarde por la noche o levantarse tarde en la mañana, sencillamente no lo pueden hacer.
- Trastorno de la fase del sueño retrasada: Este trastorno se asocia con los noctámbulos que se quedan despiertos hasta tarde en la noche y duermen hasta tarde en la mañana. Es raro entre la población en general, afecta solo a 1 o 2 personas de cada 1000, pero afecta hasta al 16% de los adolescentes.
- Trastorno del ritmo irregular de sueño y vigilia: Este se considera un trastorno raro, las personas que no tienen un ritmo constante de sueño, suelen tener muchas siestas o breves periodos de sueño durante el día.
Con frecuencia este trastorno está conectado a condiciones que afectan el cerebro. Esto puede ser un traumatismo craneoencefálico o demencia, los cuales limitan el correcto funcionamiento del reloj maestro en el hipotálamo.
La almohada correcta puede ayudar a generar ritmos circadianos que no afecten el sueño
Para ayudar a tener ritmos circadianos sanos que no alteren el ciclo sueño vigilia de nuestro organismo, es fundamental elegir un buen colchón y contar con la almohada adecuada. La almohada New Pillow 360 genera un ambiente de descanso que favorece el sueño.