Cuando pensamos en que tenemos que irnos a dormir, debemos concentrarnos en dormir las horas suficientes para levantarnos descansados. Y aunque la duración del sueño es sin duda importante, no es lo único que debemos tomar en consideración. Es importante saber qué sucede en los ciclos y etapas del sueño.
Esto comienza desde pensar en la calidad del sueño que debemos tener y si el tiempo que le dedicamos a dormir es realmente reparador. Cada etapa del sueño desempeña un papel importante para que nuestra mente y nuestro cuerpo se despierten con las energías renovadas.
Si podemos comprender lo que realmente sucede en nuestro ciclo del sueño, esto también puede ayudarnos a explicar cómo ciertos trastornos del sueño, como el insomnio, pueden afectar nuestro sueño y nuestra salud.
Los procesos que ocurren mientras nos encontramos durmiendo son muy complejos y de verdad mucha gente no tiene ni idea de lo complejo que puede llegar a ser. Dependiendo de la edad que tengamos, el sueño va a actuar como un taller de reparación de neuronas, hormonas y músculos.
Aunque no somos conscientes de lo que sucede mientras nos encontramos dormido, nuestro cerebro y nuestro cuerpo permanecen en un estado activo. Cada etapa del sueño juega un papel diferente en cómo nos sentimos al día siguiente.
El sueño no es para nada uniforme, en el transcurso de una noche, nuestro sueño total suele componerse de varias rondas del ciclo de sueño. Este se compone de cuatro etapas individuales. En una noche de sueño normal, una persona puede pasar de cuatro a seis ciclos de sueño.
Estos ciclos de sueño no suelen tener la misma duración, pero en promedio pueden duran alrededor de 90 minutos cada uno. Ser conscientes de lo que sucede en el proceso del sueño, nos va a ayudar a concientizarnos de lo importante que es una buena noche de sueño reparador.
Es normal y natural que todos los ciclos de sueño no sean iguales y que estos cambien a medida que nuestro sueño avanza en la noche. El primer ciclo de sueño suele ser el más corto, y puede durar entre 70 y 100 minutos. Los ciclos posteriores suelen durar entre 90 y 120 minutos.
Además, el tiempo que se pasa en cada etapa del sueño, suele cambiar a medida que avanza la noche. Otra cosa importante que hay que tener en cuenta, es que los ciclos de sueño pueden no ser iguales de una persona a otra y de una noche a otra, dependiendo de muchos factores, como la edad, los recientes patrones de sueño y el consumo de bebidas alcohólicas.
Lo recomendable es tener al menos 8 horas de sueño y en ese periodo se suele tener entre 4 y 6 ciclos de sueño. Cada uno de estos ciclos tiene una duración aproximada de unos 90 minutos. Estos ciclos se componen de varias etapas que van desde el sueño lento al sueño paradójico, el cual también suele llamarse sueño REM.
Tradicionalmente, el sueño se ha dividido en 4 etapas:
Cada una de estas etapas juega un papel esencial en el mantenimiento de nuestra salud mental y física. Estas etapas se determinan con base en un análisis de la actividad cerebral durante el sueño, que muestra distintos patrones que caracterizan cada etapa. Las tres primeras etapas también suelen llamarse Etapas NREM o no REM y la última simplemente Etapa REM.
El sueño de una persona puede desglosarse en varios ciclos y etapas y es lo que generalmente se conoce como arquitectura del sueño. Los estudios del sueño, pueden representarse visualmente en un hipnograma.
El sueño NREM está compuesto de tres diferentes etapas. Mientras más alta sea la etapa del sueño NREM, será mucho más difícil hacer que una persona despierte de su sueño.
La etapa 1 es esencialmente la etapa lenta o de adormecimiento, el cual suele durar generalmente de uno a cinco minutos. En esta etapa, el cuerpo no se encuentra relajado por completo, aunque ya hay una disminución de las actividades corporales y cerebrales con períodos de actividad breves.
Es fácil despertar a una persona durante esta etapa del sueño, pero si no se le molesta, puede pasar rápidamente a la etapa 2.
La etapa 2 es esencialmente la etapa del sueño ligero, el cuerpo se encuentra mucho más relajado, al igual que la respiración y la frecuencia cardiaca se hace mucho más lenta. Hay un nuevo patrón en las ondas cerebrales y el movimiento ocular se detiene. Las personas por lo general pasan la mitad de su tiempo de sueño en esta etapa.
Nos encontramos en la etapa del sueño profundo, en donde las personas suelen estar profundamente dormidos y son mucho más difíciles de despertar. El tono muscular, el pulso y la frecuencia respiratoria disminuyen en el sueño y la actividad cerebral presenta ondas que se identifican como ondas Delta. Suele durar de 20 a 40 minutos por ciclo.
La etapa final del ciclo es el sueño REM, las ondas cerebrales, los signos vitales y el movimiento de los ojos aumenta, acercándose a los niveles observados cuando estás despierto. Comienza alrededor de 90 minutos después de que entras en estado de sueño. Entre el 18 y el 23 % del tiempo de sueño es dedicado al sueño REM
Para poder tener ciclos y etapas del sueño reparadores durante una noche de sueño, es fundamental elegir un buen colchón, tomando en consideración el peso, la postura en la que dormimos, la temperatura de la habitación, entre otros.
Contar con la almohada adecuada también es importante, ya que es la primera garantía para poder tener un descanso reparador. La mejor elección a la hora de dormir pasa por la almohada New Pillow 360.
